TARTA DE QUESO Y CHOCOLATE SIN HORNO
TARTA DE QUESO Y CHOCOLATE SIN HORNO
Un postre cremoso, elegante y muy fácil de preparar, perfecto para los verdaderos amantes del chocolate. Esta tarta combina una base crujiente de galletas con un relleno suave de queso y chocolate que se deshace en la boca. No necesita horno, pero sí un poco de paciencia para que repose en frío. ¡Vale totalmente la pena!📝 INGREDIENTES
Para la base:
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200 g de galletas tipo María o Digestive
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100 g de mantequilla sin sal, derretida
Para el relleno:
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300 g de queso crema (tipo Philadelphia), a temperatura ambiente
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200 g de chocolate negro (mínimo 60% cacao)
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200 ml de nata para montar (crema para batir)
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1 cucharadita de esencia de vainilla
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2 cucharadas de azúcar glas (opcional, al gusto)
Para decorar (opcional pero recomendado):
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Virutas o ralladura de chocolate
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Frutas rojas frescas (fresas, frambuesas, arándanos)
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Hojas de menta fresca
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Cacao en polvo o azúcar glas para espolvorear
👩🍳 PREPARACIÓN COMPLETA Y DETALLADA
1. Prepara la base:
1.1. Tritura las galletas hasta obtener una textura de arena fina. Puedes hacerlo en procesadora o colocándolas en una bolsa resistente y aplastándolas con un rodillo.
1.2. Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta obtener una mezcla húmeda y homogénea.
1.3. Forra un molde desmontable de 20–22 cm con papel encerado en la base (opcional, pero recomendable para desmoldar fácilmente).
1.4. Vierte la mezcla de galleta en el molde y presiona firmemente con el dorso de una cuchara o vaso para compactar bien.
1.5. Refrigera la base durante al menos 20 minutos mientras preparas el relleno.
2. Prepara el relleno:
2.1. Pica finamente el chocolate y colócalo en un bol grande y resistente al calor.
2.2. Calienta la nata en una cacerola pequeña a fuego medio hasta que esté a punto de hervir (burbujas en los bordes).
2.3. Vierte la nata caliente sobre el chocolate. Espera 2 minutos sin mover para que se derrita bien.
2.4. Remueve con espátula o batidor manual hasta lograr una mezcla brillante y homogénea.
2.5. Añade la vainilla y el azúcar glas (si lo deseas más dulce).
2.6. Incorpora el queso crema en pequeñas porciones, batiendo suavemente con una espátula o batidor hasta obtener una mezcla lisa, sin grumos.
3. Montaje y enfriado:
3.1. Saca el molde con la base del refrigerador.
3.2. Vierte el relleno de queso y chocolate sobre la base y alisa la superficie con una espátula.
3.3. Da unos golpecitos suaves al molde contra la mesa para eliminar posibles burbujas de aire.
3.4. Cubre con film transparente y refrigera durante al menos 4 horas, idealmente toda la noche para mejor textura y sabor.
4. Decoración final:
4.1. Desmolda la tarta con cuidado y colócala sobre un plato bonito o base para tartas.
4.2. Decora al gusto: puedes usar virutas de chocolate, frutas frescas, hojas de menta y espolvorear con cacao o azúcar glas.
4.3. Sirve fría, acompañada de una taza de café, helado de vainilla o crema batida si deseas un toque más especial.
💡 CONSEJOS PROFESIONALES
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Usa chocolate de buena calidad: es el protagonista del sabor.
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Si prefieres un sabor más suave, puedes mezclar chocolate negro con chocolate con leche.
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Asegúrate de que el queso esté a temperatura ambiente para evitar grumos.
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Esta tarta también se puede congelar: déjala descongelar en la nevera antes de servir.
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Para una versión diferente, añade una capa fina de mermelada de frambuesa entre la base y el relleno.
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